Bienvenidos alumnos (as)

Esta es una herramienta que les va permitir ampliar sus conocimientos, la cual podran convinar con las clases presenciales.
Espero que sea de mucho provecho, ya que estos nuevos conocimientos seran parte de las evaluaciones.

martes, 30 de noviembre de 2010

lunes, 29 de noviembre de 2010

Objetivos del Programa de Estudio.

1 - Interpretar y valorar los hechos y fenómenos más importantes de la historia de nuestra patria, como causa fundamental del desarrollo de la sociedad nicaragense.
2 - Proporcionar a los estudiantes los conocimientos fundamentales de historia de monumentalismo nacional, su valor cultural y turística dentro del marco del desarrollo turístico Nicaraguense.
3 - Fomentar y desarrollar hábitos y conocimientos y habilidades en los estudiantes para la realización de estudio de investigaciones, mediante la iniciativa y trabajo creativo de cada uno de estos.
4 - Identificar los recursos monumentalistas existentes en las primeras ciudades coloniales del país y su proyección en el desarrollo turístico del pais.
Leer más...

viernes, 26 de noviembre de 2010

La Guerra de Sandino.

Nicaragua, 1895-1934
Augusto Cesar Sandino"Nosotros iremos hacia el sol de la libertad o hacia la muerte; y si morimos, nuestra causa seguirá viviendo. Otros nos seguirán."
"En uno de aquellos días manifesté a mis amigos que si en Nicaragua hubieran cien hombres que la amaran tanto como yo, nuestra nación restauraría su soberanía absoluta, puesta en peligro por el mismo imperialismo yanqui. Mis amigos me contestaron que posiblemente habría en Nicaragua ese número de hombres, o más..."
"Mi mayor honra es surgir del seno de los oprimidos, que son el alma y nervio de la raza."
  1. Augusto Cesar Sandino
  2. Augusto Cesar Sandino
  3. Augusto Cesar Sandino
Augusto Nicolás Calderón Sandino, nació el 18 de mayo de 1895 en Niquinohomo, departamento de Masaya. Su madre, Margarita Calderón, era una humilde campesina, que se ganaba la vida como doméstica y obrera agrícola.  Gregorio Sandino, su padre, fue un mediano propietario y productor agrícola, con quien se fue a vivir a los 11 años de edad.
La infancia de Sandino transcurrió junto a su madre con la cual trabajaba recolectando café en las plantaciones del Pacífico nicaragüense, ahí conoció y sufrió toda clase de miserias y privaciones.
En su adolescencia, fue testigo de la primera gran intervención militar del imperialismo yanqui en su tierra, que culminó con el asesinato del general Benjamín Zeledón, el 4 de octubre de 1912. Sandino quedó muy impresionado con la imagen del patriota.
"Era yo un muchacho de 17 años y presencié el destace de nicaragüenses en Masaya y otros lugares de la República, por las fuerzas filibusteras norteamericanas. Personalmente miré el cadáver de Benjamín Zeledón, quien fue sepultado en Catarina, pueblo vecino al mío. La muerte de Zeledón me dio la clave de nuestra situación nacional frente al filibusterismo norteamericano; por esa razón, la guerra en que hemos estado empeñados, la consideramos una continuación de aquella."
  1. Augusto Cesar Sandino
  2. Augusto Cesar Sandino
  3. Augusto Cesar Sandino
Más tarde, Sandino abandona la casa de su padre para buscarse la vida por sí mismo. Así, trabaja como ayudante de mecánica, en un lugar cerca de la frontera con Costa Rica. Posteriormente,  en 1920, viaja a Honduras y a Guatemala, en 1923, donde trabaja en las plantaciones de la United Fruit. Posteriormente marcha a México donde  trabaja, para empresas petroleras en Tampico y Cerro Azul.
Durante su estancia en México, Sandino se vincula con líderes sindicales, obreros, militantes socialistas, anarquistas y masones. Conoce de las luchas sindicales, de la agresión yanqui contra México por el control de los yacimientos petroleros, de la Revolución Mexicana y de las luchas de la clase trabajadora.
En agosto de 1925, luego de 13 años de ocupación, Estados Unidos retira sus tropas de Nicaragua. Sin embargo, permanecen los instructores de la Constabulary, antecesora de la Guardia Nacional. En octubre, ocurre el golpe militar del general Emiliano Chamorro.
En el mes de mayo del año 1926, ocurre un alzamiento liberal contra Chamorro. Las tropas norteamericanas desembarcan en Bluefields. Al enterarse del inicio de la Guerra Constitucionalista, Sandino parte rumbo a Nicaragua a donde llega el 1 de junio.
"...en vista de los abusos de Norteamérica en Nicaragua, partí de Tampico, México, el 18 de mayo de 1926 -en donde me encontraba prestando mis servicios materiales a la compañía yanqui- para ingresar al Ejército Constitucionalista de Nicaragua, que combatía contra el régimen impuesto por los banqueros yanquis en nuestra república."
  1. Augusto Cesar Sandino
  2. Augusto Cesar Sandino
  3. Augusto Cesar Sandino
El 26 de octubre de 1926,  con algunos trabajadores del mineral de San Albino se alza en armas y se incorpora a la causa constitucionalista.
El 2 de noviembre, en El Jícaro, durante su primer enfrentamiento contra las tropas conservadoras, sufre su primera derrota.
El 24 de diciembre, tropas norteamericanas desembarcan en Puerto Cabezas. Al día siguiente, Sandino consigue armas y municiones ayudado por prostitutas del puerto. En entrevista sostenida con el general José María Moncada, en Prinzapolka, éste le ordena regresarlas; pero Sandino logra conservar las armas e inicia el retorno a Las Segovias.
En enero de 1927, tropas norteamericanas desembarcan en Corinto.
En febrero, Sandino se instala en El Yucapuca y comienza, en San Juan de Segovia, una campaña militar victoriosa; participando, él mismo, en gran número de combates. Las tropas conservadoras son totalmente derrotadas y Moncada trata de deshacerse de él enviándolo a Boaco.
A comienzos de mayo de 1927 mantiene un intercambio de correspondencia con Moncada sobre los términos del armisticio que éste ha logrado con el delegado del presidente Calvin Coolidge en Nicaragua, Henry Stimson.
El 12 de mayo de 1927, en una circular dirigida a las autoridades locales de todos los departamentos anuncia su firme determinación de continuar la lucha hasta que sean retiradas las tropas norteamericanas de ocupación.
El 18 de mayo contrae matrimonio con con Blanca Aráuz. A la cual escribe en una ocasión: "El amor a mi patria lo he puesto sobre todos los amores y tú debes convencerte que para ser feliz conmigo, es menester que el sol de la libertad brille en nuestras frentes."
  1. Augusto Cesar Sandino
  2. Augusto Cesar Sandino
  3. Augusto Cesar Sandino
El 1 de julio de 1927,  desde su campamento en Mineral de San Albino, emite su primer Manifiesto Político dirigido al pueblo de Nicaragua.
El 14 de julio responde a la propuesta de rendición que le hiciera el capitán de los marines, Gilbert Hatfield.
El 16 de julio, luego de una batalla de 15 horas, toma por unas horas El Ocotal. La aviación norteamericana bombardea y ametralla el poblado causando 300 muertos entre la población civil.
Sandino sigue combatiendo en varias ciudades y se retira hacia su campamento de El Chipote; inicia la guerra de guerrillas.
El 2 de septiembre de 1927 se constituye el Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua.
El 14 de noviembre suscribe el Acuerdo sobre los traidores a la Patria.
En diciembre, los gobiernos de Coolidge y Díaz acuerdan la transformación de la Constabulary en Guardia Nacional.
El 26 de enero de 1928, luego de varios días de «combate», los marines alcanzan finalmente la cumbre de El Chipote y encuentran sólo muñecos de zacate.
El 22 de junio de 1928 el dirigente comunista salvadoreño Farabundo Martí se incorpora a las filas del sandinismo.
Combatientes internacionalistas acudieron al llamado de la lucha antiimperialista de Nicaragua; intelectuales, estudiantes y obreros llegaban de distintos puntos de América Latina hasta Las Segovias a prestar servicio militar; los hubo de México, El Salvador, Guatemala, Costa Rica, Republica Dominicana, Venezuela, Colombia, Honduras. Algunos como soldados de línea, otros sirvieron en el Estado Mayor como secretarios de Sandino; varios allí murieron.
El 6 de noviembre de 1928, en elecciones organizadas y supervisadas por los marines, es electo presidente el traidor Moncada.
El 23 de mayo de 1929, Sandino, parte de Nicaragua rumbo a México buscando, infructuosamente, el apoyo del presidente mexicano Emilio Portes Gil. Sus generales prosiguen la lucha. Regresa a Nicaragua el 16 de mayo de 1930.
El 15 de febrero de 1931 suscribe su manifiesto Luz y Verdad.
En noviembre de 1932, Juan Bautista Sacasa es electo presidente. Anque solicitó a Washington la permanencia de los marines, su petición fue denegada.
El 1 de enero de 1933, triunfa la causa sandinista al retirarse los invasores norteamericanos de Nicaragua. Sacasa asume la presidencia y el «general» Anastacio Somoza García la jefatura de la Guardia Nacional. Sandino viaja a Managua en febrero y firma un tratado de paz.
"La paz se firmó para evitar el regreso de la intervención armada que apenas estaba detrás de la puerta, esperando regresar antes de un año... Ese es el secreto por el cual no salgo del Norte, para estar pendiente de todos los momentos en que se presente la oportunidad de restaurar también nuestra independencia política-económica."
El 20 de mayo emprende viaje nuevamente a Managua para quejarse con Sacasa por los constantes ataques de la Guardia Nacional en contra de su gente. Allí regresa el 30 de noviembre con la misma queja sin obtener resultados.
Después de firmado el convenio, Sandino viaja en varias ocaciones a Managua (el 20 de mayo y el 30 de noviembre), para entrevistarse con Sacasa y discutir las violaciones que de dicho convenio hacía la Guardia Nacional, asesinando y persiguiendo a los miembros del Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua. De sus entrevistas no obtuvo ningún resultado.
El 21 de febrero de 1934, al bajar la loma de Tiscapa, luego de una cena con Sacasa, es capturado y posteriormente asesinado junto a loslos generales Francisco Estrada y Juan Pablo Umanzor por orden de Somoza García. Poco antes, su hermano Sócrates había corrido la misma suerte. El coronel Santos López, quién participará posteriormente en la fundación del Frente Sandinista de Liberación Nacional, logra escapar.
El 23 de agosto de 1934, el Congreso decreta una amnistía para todos los crímenes cometidos por la Guardia Nacional.
Creyeron que asesinando a Sandino moría su ideología. Pero se equivocaban, el sandinismo había calado hondo en la conciencia del pueblo, buscando completar la obra iniciada por el Padre de la Revolución Popular y Antiimperialista. Es así como surge el Frente Sandinista de Liberación Nacional, FSLN, heredero y continuador del programa popular y antiimperialista del general Sandino.
Bibliografía
El pensamiento vivo de Sandino, Casa de las Américas, La Habana, 1980.
Gregorio Selser, Nicaragua de Walker a Somoza, Mex Sur Editorial, México, 1984
http://www.elortiba.org/sandino.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Augusto_C._Sandino
Leer más...

La Guerra Constitucionalista.

Nicaragua: 165 años de Vida independiente

sandino.jpg (9063 bytes)Termina el período de Adolfo Díaz y los norteamericanos no aceptan la posible candidatura del Dr. Julián Irías por considerarlo muy vinculado al zelayismo y los liberales se abstienen de participar en la contienda electoral y Emiliano –único candidato- sube al Poder en 1917. Su período fue tranquilo, por fin...y al terminar su período en 1921, vino la nueva elección con manifestaciones de masas, aguardiente, diatribas mutuas por la prensa, mucho grito y al final...inconformidad del vencido. Como sea, era un paso hacia la pacificación de nuestro ardor político y así, en 1921, toma posesión Don Diego Manuel Chamorro (conservador).
Don Diego muere en el poder el 12 de octubre de 1922 y el Vice Presidente, Don Bartolomé Martínez, ocupa la presidencia, pero los Vice Presidentes que cogen la cola de un período ponen sus ansias en participar en el siguiente. Emiliano Chamorro quería también otra vez la presidencia, pero se logra sacar un tercero en discordia: Carlos José Solórzano (conservador) y para Vice Presidente un liberal: Juan Bautista Sacasa.
El Lomazo
Esta fórmula conservador-liberal gana las elecciones y toman posesión en 1925. Sin embargo, el caudillaje de Emiliano Chamorro, así como su ambición, lo hacen dar "el lomazo" (toma de la loma de Tiscapa, asiento del Poder Ejecutivo) y Solórzano renuncia en 1926. Chamorro asume el poder. El Vice Presidente Sacasa no renuncia sino que reclama la presidencia para sí., Se va al exilio y regresa, apoyado por México, con la Revolución Constitucionalista.
Chamorro rompe así el otra vez naciente orden constitucional y esta nueva presidencia de facto no es reconocida por varios países importantes -entre ellos Estados Unidos- y ante la inminente invasión por liberales apoyados por México, renuncia y deposita el poder en el Designado por el Congreso, Don Sebastián Uriza quien, presionado por Washington lo deposita en Don Adolfo Díaz. Estamos en vísperas de la Guerra Constitucionalista.
La Guerra Constitucionalista
El Dr. Juan Bautista Sacasa, como Vice Presidente depuesto por Chamorro (y ante la renuncia del Presidente Don Carlos Solórzano cuando el "lomazo de Emiliano") reclama, como Vice Presidente, la presidencia de la República alegando su derecho constitucional. Con la ayuda de México desembarca con fuerzas en Puerto Cabezas donde instala otro gobierno. La guerra se ciñe nuevamente en Nicaragua. El 4 de mayo de 1927, con la nueva intervención de los marines americanos, el representante personal del Presidente Coolidge de Estados Unidos, Henry L. Stimson, con instrucciones de lograr la paz, por cualquier medio, logra forzar un acuerdo -el del "Espino Negro" por el que se deponen las armas y se acepta la Presidencia de Díaz bajo la promesa de que los norteamericanos supervigilarán las siguientes elecciones de 1928.
Sandino. Sin embargo, un rebelde -Augusto César Sandino- rechaza atacar lo acordado en ese Pacto del Espino Negro, se enmontaña y alega que no depondrá sus armas y actitud hasta tanto los marines no abandonen Nicaragua. Se habla de "cortes del chaleco"; de muertes, de bombardeos, mutilaciones, bandolerismos; así como de reivindicaciones, defensa de la soberanía nacional y gesta heróicas. A pesar de la manifiesta obsesión de Sandino contra la injerencia norteamericana en los asuntos de Nicaragua, aparentemente Sandino reconoce los fracasos e impotencias de nuestros procesos políticos y el 24 de mayo de 1927 dirige telegrama despachado desde Yalí al Jefe del Departamento de Marinos en Jinotega en cuya parte medular dice:
"...teniendo en cuenta el anhelo de paz que a todos anima, para que esta sea eficaz y duradera, proponemos como condición indispensable la abstención de los dos partidos de toda injerencia en los asuntos de la República, mientras no hayan elecciones libres. Por tanto si Estados Unidos, con buena fe ha intervenido en el país, proponemos como condición Sine Qua Non para deponer nuestras armas que asuma el Poder un gobernador militar de los Estados Unidos mientras se realicen las elecciones presidenciales supervigiladas por ellos mismos".
La verdad es que, además de esta gesta de Sandino, en Octubre de 1929 ocurre el crash de la Bolsa de Estados Unidos. La economía decae, millones quedan sin empleo y sube en enero de 1933 un nuevo presidente, Franklin Delano Roosevelt quien ofrece una nueva política del "Nuevo Trato" con América Latina. Además, las medidas de emergencia económicas tomadas por Roosevelt para solucionar su crisis interna favorecen el retiro de los marines. Esto lo completa en 1933 y Sandino suspende su lucha armada. Todo el resto de la historia es más o menos conocida por todos, aunque el tiempo dirá toda la verdad que siempre es distorsionada por los vencedores.
La intervención ha dejado profundas raíces entre los dos países. Para los nicaragüenses significa un humillante recordatorio de nuestros fracasos e impotencias históricas; una obsesión (vanguardizada y atizada por los sandinistas) con la creencia que los Estados Unidos son la raíz de todos nuestros males. Para los americanos, ha sido una razón para crearse un complejo de culpa. Sin embargo, van hoy -digamos- a Líbano por similares razones "estratégicas" que adujeron para intervenir en Nicaragua.
Primera entrega pacífica del poder en nuestra historia. En 1928, tal como ya se dijo atrás, como producto de las elecciones supervigiladas por los norteamericanos, sale electo el candidato de la oposición (liberal), el General José María Moncada (76,676 votos a los liberales y 56,487 a los conservadores) quien toma posesión ante el Congreso el 1o. de enero de 1929. El presidente saliente, Don Adolfo Díaz, conservador, al hacer entrega de la presidencia a Moncada, en su discurso ante el Congreso dijo:
"Obedeció al imperativo del pueblo, por manos del Excelentísimo Señor Presidente del Congreso os hago entrega de esta banda, símbolo de autoridad, y con ella de la presidencia de la República que estáis llamado a ejercer por voluntad de la mayoría y por el dictado de la Constitución".
Marca este acontecimiento un hecho histórico excepcional: Por primera vez en nuestra historia se transfiere el Poder, del partido en el poder al partido de la oposición, por medios pacíficos: un débil germinar de la democracia abonada durante tantos años con abundante sangre y lágrimas. Pero esto fue un acto fugaz; nunca ha vuelto a repetirse. Desde ese 1o. de enero de 1929 el Partido Liberal permaneció en el Poder, hata que fue botado por la fuerza el 19 de julio de 1979.
Durante el período del General Moncada, los marines permanecen en Nicaragua y se comienza a crear la Guardia Nacional, apolítica, según su ley constitutiva, integrada por elementos de los dos partidos históricamente contendientes: Liberal y Conservador. Tanto los marines como la naciente Guardia Nacional luchan contra Sandino quien va obteniendo notoriedad mundial por su actitud anti-intervensionista.
A finales de 1929 ocurre el crash de la Bolsa en Estados Unidos y se produce una depresión económica mundial. Los precios mundiales del café -nuestro principal producto de exportación- bajan de 18 centavos a 7 centavos dólar la libra. Los problemas económicos de Nicaragua, agotada por las guerras y revoluciones, se acrecientan. Además, el 31 de marzo de 1931 un fuerte terremoto destruye la ciudad de Managua. El país está inquieto y temeroso de su futuro.
Leer más...

Tratado Chamorro / Bryan.

El Tratado Bryan-Chamorro fue un acuerdo internacional, firmado en 5 de agosto de 1914 en Washington, Estados Unidos, por el secretario de Estado de los Estados Unidos, William Jennings Bryan de la administración del presidente William Taft y el ministro plenipotenciário de la Nicaragua, el general Emiliano Chamorro.
De acuerdo con el tratado, el gobierno nicaragüense concedía en perpetuidade, los derechos de propiedad exclusiva de las tierras y de las instalaciones necesarias para la construcción de un canal inter-oceânico teniendo como ruta el río San Juan y el Lago Nicaragua (el Canal de la Nicaragua). También dio 99 años de locação sobre las islas del milho, en el Océano Atlântico, y permitía a los americanos construyan una base naval en el Golfo de Fonseca en la costa del Pacífico. La administración Woodrow Wilson cambió el tratado, añadiendo una disposición semejante la Enmienda Platt, que autoriza la intervención militar de los EUA en la Nicaragua. Senado de los Estados Unidos se opusieron a la nueva disposición, en respuesta, ella fue abandonada y formalmente el tratado fue ratificado en 19 junio de 1916.
Por varias veces desde la apertura en 1914 del canal del Panamá, la ruta por la Nicaragua fue reconsiderada. Su construcción iría encurtar la distancia entre Nueva York y San Francisco por cerca de 800 kilómetros (500 millas). El Tratado Bryan-Chamorro mantenía la Nicaragua en competición con el Canal del Panamá.
En 1916, los Gobiernos de El Salvador y Costa Rica recurrieron al Tribunal de Justicia de la América Céntrica y el Tribunal de Cartago, para protestar contra los términos del Tratado, que vio sus derechos violados. El Tribunal de Cartago en 1916 fue en favor de Costa Rica y en 1917 por El Salvador, pero la Nicaragua anunció que no iría a aceptar las decisiones del juez.
El tratado se mantuvo en vigor hasta 1972, en la posesión de una convención en 14 de Julio de 1970 que oficialmente abolía el Tratado y de todas sus disposiciones.
Creative Commons Attribution-ShareAlike License
Leer más...

SANDINO.

Augusto Nicolás Calderón Sandino nace el 18 de mayo de 1895 en Niquinohomo, departamento de Masaya. De niño, trabaja con su madre recolectando café en las plantaciones del Pacífico nicaragüense.En octubre de 1909 una insurrección apoyada por Estados Unidos provoca la renuncia del presidente José Santos Zelaya. Asume el cargo José Madriz, pero en febrero de 1910 tropas norteamericanas desembarcan en Corinto y provocan también su renuncia. Luego de múltiples maniobras toma el poder Adolfo Díaz, tenedor de libros de una empresa minera norteamericana y aliado incondicional de Washington. Estados Unidos otorga un par de empréstitos a Nicaragua y toma, en garantía, el control de las aduanas, el Ferrocarril Nacional, los vapores del Gran Lago y fondos no utilizados de otro préstamo.
En julio de 1912 estalla una sublevación en contra del títere Díaz. Tropas norteamericanas desembarcan en Corinto. Benjamín Zeledón enfrenta a los invasores y muere en combate el 4 de octubre. A sus 17 años Sandino queda muy impresionado con la imagen del patriota.
En 1916 trabaja como ayudante de mecánica cerca de la frontera con Costa Rica. Viaja a Honduras en 1920 y a Guatemala en 1923, donde trabaja en las plantaciones de la United Fruit. Marcha a México y trabaja para empresas petroleras en Tampico y Cerro Azul.
En agosto de 1925, Estados Unidos retira sus tropas de Nicaragua; la ocupación ha durado 13 años. Permanecen, sin embargo, los instructores de la Constabulary, antecesora de la Guardia Nacional. Golpe militar del general Emiliano Chamorro en octubre. Washington se niega a reconocerlo.
En mayo de 1926 ocurre un alzamiento liberal en contra de Chamorro. Tropas norteamericanas desembarcan en Bluefields. Al enterarse del inicio de la Guerra Constitucionalista, Sandino parte rumbo a Nicaragua a donde llega el 1 de junio.
El 26 de octubre de 1926 se alza en armas con algunos trabajadores del mineral de San Albino y se incorpora a la causa constitucionalista. El 2 de noviembre, en su primer enfrentamiento contra las tropas conservadoras en El Jícaro, sufre su primera derrota.
El 24 de diciembre, tropas norteamericanas desembarcan en Puerto Cabezas. Al día siguiente, Sandino consigue armas y municiones con ayuda de prostitutas del puerto. El general José María Moncada le ordena regresarlas en una entrevista que sostienen en Prinzapolka; logra conservar las armas e inicia el retorno a Las Segovias.
En enero de 1927, tropas norteamericanas desembarcan en Corinto. En febrero, Sandino se instala en El Yucapuca e inicia en San Juan de Segovia una campaña militar victoriosa; participa en un gran número de combates. Las tropas conservadoras son totalmente derrotadas y Moncada trata de deshacerse de él enviándolo a Boaco.
A principios de mayo de 1927 mantiene un intercambio epistolar con Moncada sobre los términos del armisticio que éste ha logrado con Henry Stimson, delegado del presidente Calvin Coolidge en Nicaragua. El 12 de mayo de 1927 en una circular dirigida a las autoridades locales de todos los departamentos anuncia su determinación de continuar la lucha hasta el retiro de las tropas norteamericanas de ocupación. El 18 de mayo se casa con Blanca Aráuz.
El 1 de julio de 1927 emite su primer Manifiesto Político dirigido al pueblo de Nicaragua desde su campamento en Mineral de San Albino. El 14 de julio responde a la propuesta de rendición que le hiciera Gilbert Hatfield, capitán de los marines. El 16 de julio, después de una batalla de 15 horas, toma por unas horas El Ocotal. La aviación norteamericana bombardea y ametralla el poblado causando 300 muertos entre la población civil.
Combate en varias ciudades y se retira hacia su campamento de El Chipote; inicia la guerra de guerrillas. El 2 de septiembre de 1927 se constituye el Ejército Defensor de la Soberanía Nacional de Nicaragua. El 14 de noviembre suscribe el Acuerdo sobre los traidores a la Patria.
En diciembre, los gobiernos de Coolidge y Díaz acuerdan la transformación de la Constabulary en Guardia Nacional.
Después de varios días de «combate», el 26 de enero de 1928 los marines alcanzan finalmente la cumbre de El Chipote y encuentran sólo muñecos de zacate.
Farabundo MartíEl 22 de junio de 1928 el dirigente comunista salvadoreño Farabundo Martí se incorpora a las filas del sandinismo.
El 6 de noviembre de 1928, en elecciones organizadas y supervisadas por los marines, es electo presidente el traidor Moncada.
El 23 de mayo de 1929 sale de Nicaragua con rumbo a México buscando, infructuosamente, el apoyo del presidente mexicano Emilio Portes Gil. Sus generales prosiguen la lucha. Regresa a Nicaragua el 16 de mayo de 1930.
El 31 de diciembre de 1930 las tropas de Miguel Ángel Ortez emboscan una patrulla de marines en Achuapa.
El 15 de febrero de 1931 suscribe su manifiesto Luz y Verdad.
En noviembre de 1932, Juan Bautista Sacasa es electo presidente. Poco antes había solicitado la permanencia de los marines, sin embargo, en esta ocasión Washington se niega.
Sandino y Sacasa tras la firma del tratado de pazEl 1 de enero de 1933 triunfa la causa sandinista al retirarse los invasores norteamericanos de territorio nicaragüense. Sacasa asume la presidencia y el «general» Anastacio Somoza García la jefatura de la Guardia Nacional. Sandino viaja a Managua en febrero y firma un tratado de paz.
El 20 de mayo viaja nuevamente a Managua para quejarse con Sacasa por los constantes ataques de la Guardia Nacional en contra de su gente. Regresa el 30 de noviembre por la misma razón sin obtener resultados.
El 21 de febrero de 1934 al bajar la loma de Tiscapa, después de una cena con Sacasa, es capturado y posteriormente asesinado con los generales Francisco Estrada y Juan Pablo Umanzor por orden de Somoza García. Poco antes, su hermano Sócrates había corrido la misma suerte. El coronel Santos López, quién participará posteriormente en la fundación del Frente Sandinista de Liberación Nacional, logra escapar.
El 23 de agosto de 1934, el Congreso decreta una amnistía para todos los crímenes cometidos por la Guardia Nacional.
Augusto C. Sandino en Memoria del fuego
Bibliografía
El pensamiento vivo de Sandino, Casa de las Américas, La Habana, 1980. Gregorio Selser, Nicaragua de Walker a Somoza, Mex Sur Editorial, México, 1984.

Comentarios
Leer más...

Benjamín Zeledón Héroe nacional.

Este patriota nicaragüense nació el 4 de Octubre de 1879, en la Concordia, Jinotega, y murió 33 años más tarde, en 1912, en Catarina, Masaya, en la misma fecha de su nacimiento, 4 de Octubre.
Hijo de Marcelino Zeledón Ugarte y de María Salomé Rodríguez, estudió la primaria en Escuela del Maestro Inocencio Aráuz. En 1895, a sus 16 años, lo enviaron a Tegucigalpa, a cursar la secundaria en el Colegio “El Espíritu del Siglo” dirigido por el Dr. y General Rafael Dávila. En 1899 obtuvo su Bachillerato y ese mismo año inicia su carrera universitaria. En 1900 retornó a Nicaragua, a seguir sus estudios de leyes. Y tuvo que impartir clases en una escuela pública y a domicilio en Managua. El 19 de Mayo de 1903, que estalló en Chontales la revolución conocida como “Revolución del Lago”, encabezada por el Gral. Emiliano Chamorro, Zeledón tuvo que incorporarse a la guerra, al lado del Gral. Fernando María Rivas. Meses más tarde, el 17 de Septiembre de 1903, el Presidente Zelaya le extiende el título de Doctor en Leyes.
En 1905 se casó con Ester Ramírez Jerez, con la que procreó 4 hijos. Benjamín, Marco Aurelio, Victoria y Olga.
Este mismo año Zelaya lo nombró Auditor de Guerra. Y en la lucha fratricida de El Salvador y Honduras contra Nicaragua, Zeledón peleó en la batalla de Namasigüe. En el propio campo de batalla fue ascendido a Coronel del ejército en atención a su heroísmo y valentía demostrada.
Después de desempeñarse como Ministro de la Guerra, Zeledón sustituyó al Doctor Madriz en la Corte Internacional Centroamericana. Cuando el Doctor Madriz deja la Presidencia, Zeledón y toda la intelectualidad liberal parten al exilio, unos a México y otros a Costa Rica. Consecuencia de la contrarrevolución de 1910, llega a la Presidencia, después de Juan Estrada, Adolfo Díaz, quien nombró a Ministro de la Guerra al General Luis Mena. Después marchó sobre Managua, pero la llegada de nuevos contingentes para el gobierno de Adolfo Díaz, obligaron a Zeledón a replegarse a Masaya. El Contralmirante gringo W. H. Souterthand estableció su cuartel en Granada y el Comandante Buttler en Corinto. Sus altaneras notas dirigidas al General Zeledón, exigiéndole rendición y vía libre para los trenes, constituyeron un tremendo ultraje a la Soberanía y Dignidad Nacional. Zeledón respondió con letras de dignidad y patriotismo.
El General Luis Mena claudicó en Granada y fue deportado a Panamá. La resistencia mantuvo al General Zeledón, quien quedó abandonado, sin armas y desinformado. León y Jinotepe cayeron el 3 de Octubre. Masaya cedió sitio y al amanecer del 4 se tomaron el Coyotepe.
Varias son las versiones sobre la muerte del joven Doctor y General Zeledón. Unos dicen que cae acribillado por un caballería enemiga que le exigió rendirse, otros afirman que fue herido, capturado y fusilado poco después como reo de guerra, se cuenta también que su cadáver fue llevado en carreta y fue hasta amarrado a un caballo y exhibido por las calles y caminos entre Catarina y Niquinohomo.

Carta-Testamento de Benjamín F. Zeledón a su esposa Ester y a sus hijos, Benjamín , Victoria, Marco y Olga

El destino cruel parece haber pactado con Chamorro y demás traidores para arrastrarme a un seguro desastre con los valientes que me quedan. Carecemos de todo: víveres, armas y municiones y rodeados de bocas de fuego como estamos, y 2,000 hombres listos al asalto, sería locura esperar otra cosa que la muerte, porque yo y los que me siguen, de corazón, no entendemos de pactos, y menos aún de rendiciones.
Para los que tenemos la dicha de sentir arder en nuestros pechos la llama del verdadero patriotismo, para quienes sabemos que quien sabe morir, sabe ser libre, y, aunque veo por los preparativos que se hacen que yo y mis bravos y valientes compañeros vamos derecho a la muerte porque todos hemos jurado no rendirnos, no dejo de pensar en ti, mi noble y abnegada compañera, que con valor espartano me dejaste empuñar nuestra bandera de libres y patriotas, porque tú también has sentido el ultraje del invasor y la infamia y traición de quienes lo trajeron, para eterno baldón suyo y vergüenza de los nicaragüenses.
No me hago ilusiones. Al rechazar las humillantes ofertas de oro y de honores que se me hicieron, firmé mi sentencia de muerte, pero si tal cosa sucede moriré tranquilo, porque cada gota de mi sangre derramada en defensa de mi patria y de su libertad, dará vida a cien nicaragüenses que, como yo, protesten a balazos del atropello y la traición de que es actualmente víctima nuestra hermosa pero infortunada Nicaragua, que ha procreado un Partido Conservador compuesto de traidores.
Si el yankee a quien quiero arrojar de mi país, me vence en la lucha que se aproxima y, milagrosamente, quedo con vida, te prometo que nos marcharemos fuera, porque jamás podría tolerar y menos acostumbrarme a la humillación y la vergüenza de un interventor. Si muero... moriré en mi lugar por mi patria, por su honor, por su soberanía mancillada. Repito: si vivo, nos iremos de Nicaragua mientras flamee en ella el pabellón norteamericano. Si muero... no llores, no te aflijas porque en espíritu te acompañaré siempre y porque mis buenos y leales amigos en lo particular, y el Partido Liberal, en general, quedan allí para ayudarlos y protegerlos como yo lo haría si pudiera. Si en estos momentos no tuviera esa consoladora esperanza, moriría desesperado, porque si la patria tiene derecho a mi vida, mi esposa y mis hijos tiene pleno derecho a la protección de ella.
Adiós... o hasta la vista. Quién lo sabe? Leer más...

Augusto Nicolás Calderon Sandino.

Uno de los personajes importantes de la primera mitad del siglo XX fue Augusto Nicolás Calderón Sandino, mejor conocido como Augusto C. Sandino, general de origen campesino, que cuando liberales y conservadores llegan al pacto del Espino Negro continuó la lucha contra la intervención norteamericana. La última entrevista que diera el General Sandino fue el 3 de febrero de 1933 al periodista de LA PRENSA Adolfo Calero Orozco (1899-1980), un día después de suscribir con el presidente Juan B. Sacasa los “Convenios de Paz”, los cuales implicaron la disolución de su Ejército y, en la práctica, la firma de su sentencia de muerte. La muerte de Augusto C. Sandino se ordenó a las siete de la noche en la oficina del Jefe Director de la Guardia Nacional y se ejecutó aproximadamente a las 23.00 en un predio de barrio Larreynaga, entonces periférico de la Vieja Managua, un 21 de febrero de 1934.
Desde 1936 a 1979, Nicaragua vive una era marcada por la sucesión en el poder de distintos dictadores, pertenecientes a la familia Somoza.
Desde su Independencia, hasta la Revolución de 1979 Nicaragua estuvo muy influenciada por tres poderosas familias: Chamorro, Sacasas y Somoza. Leer más...

viernes, 19 de noviembre de 2010

Pactos Dawson.

Los “Pactos Dawson”


Cuando asumió la Presidencia Juan José Estrada, en 1910, los gobiernos de Centroamérica y Estados Unidos no reconocieron al Gobierno de Nicaragua. Ante esta dura realidad, Estrada buscó cómo formalizar las relaciones internacionales con el Gobierno de Washington. Dio el primer paso y pidió que el Departamento de Estado lo reconociera como Presidente Provisorio, comprometiéndose a verificar elecciones en un tiempo prudencial. El Gobierno norteamericano, entonces, envió a Thomas Dawson, quien firmó con el Gobierno de Nicaragua los “Pactos Dawson”.

Los firmantes se comprometieron a elegir a los asambleístas para una Asamblea Constituyente, la que nombraría un presidente y un vicepresidente para un gobierno “Pro témpore” o provisional de dos años. Pedían que dicha Asamblea diera apoyo al propio Estrada para Presidente y a Adolfo Díaz para Vicepresidente. En los pactos se abría la puerta a los préstamos norteamericanos —de moda, por la política de la Diplomacia del Dólar— para que Nicaragua pudiera pagar los reclamos legítimos tanto a los extranjeros como a los nacionales; también se establecía que una Comisión Mixta examinaría los contratos y concesiones norteamericanas. Además, el Gobierno se comprometía a castigar a los responsables de la muerte de Cannon y Groce, dos norteamericanos ajusticiados por Zelaya, después de sentenciados a muerte en un juicio, al ser acusados de querer volar un barco de guerra.

La Asamblea se comprometía a elaborar una Constitución y, basado en ella, a tener elecciones generales para nombrar al Presidente para el siguiente período presidencial. Sin embargo, se concretaba que “el escogido debía representar a la Revolución y al Partido Conservador”, y se descartaba explícitamente la candidatura de Estrada y de los elementos zelayistas. Todo ello beneficiaba a Adolfo Díaz, el candidato de Estados Unidos, quien fue de hecho elegido Presidente para el gobierno que sucedió al “Pro témpore”.

Cortesía del IHNCA
. Leer más...

Intervención norteamericana.

La intervención norteamericana
—Karlos Navarro—
Managua

La intervención norteamericana (1910-1929), estructuró un nuevo orden político, con base a instituciones débiles. Durante este período los norteamericanos buscaron cómo crear instituciones que representaran la autoridad del Estado y la solvencia fiscal. Es por esa razón que en 1911 se creó la Recaudación General de Aduanas (RGA). En 1912 se formó el Banco Nacional de Nicaragua; en 1917 se constituyó la Alta Comisión cuya función era autorizar, fiscalizar y supervisar el presupuesto nacional. En 1923 se decretó, a iniciativa de los norteamericanos, la Ley Dodds, que impuso el bipartidismo y se mantuvo, con algunos cambios hasta 1979 . Por último mediante el Tratado Cuadra Pasos-Munro, se creó la Guardia Nacional, que sería con el tiempo base y sustento de los Somozas, durante más de cuarenta años.
Leer más...

Revolución Liberal.

La Revolución Liberal de 1893

El día 11 de julio de 1893, en la ciudad de León, se subleva apoyado por Anastacio Ortiz. Se desconoce la junta de gobierno de don Joaquín Zavala Solís y se forma otra integrada por el General José Santos Zelaya López, Francisco Baca, Anastasio Ortiz y Pedro Balladares. Entran a la capital Managua derrotando a los ejércitos conservadores el 25 de julio en la Cuesta del Plomo (al oeste de la ciudad) y entrando a esta ese mismo día por la Calle del Triunfo aún existente.

Su gobierno

En 1894 ordeno al periodista y militar Rigoberto Cabezas la toma por la fuerza la Costa de los Mosquitos, actual Costa Caribe de Nicaragua, una disputada región bajo protectorado británico. La lejanía del territorio permitió que el Reino Unido, no queriendo embarcarse en una aventura colonial tan lejana y de tan poco valor, reconociera la soberanía nicaragüense.
En 1902 fue reelegido Presidente. La posibilidad de construir un canal a través del istmo de Centro América era una cuestión controvertida desde tiempo atrás. Cuando Estados Unidos decidió hacerlo en territorio panameño, Zelaya intentó llegar a un acuerdo con Alemania y Japón para que construyeran el proyecto en Nicaragua.
Su gestión gubernamental provocó gran desarrollo en el país de Nicaragua. Modernizó al Estado introduciendo modernas leyes, creó nuevas instituciones, promulgó códigos, reglamentos, introdujo el Habeas Corpus. El General Zelaya convirtió a Nicaragua en la más próspera y rica nación de Centroamérica. Instauró la educación gratuita y obligatoria, construyó escuelas, trajo de correos, vapores, el ferrocarril, telégrafos, carreteras, entre muchos avances más.
Era partidario de la creación de unos Estados Unidos de América Central, lo que le llevó a apoyar a otros partidos liberales de distintos países centroamericanos que pudieran defender el mismo proyecto, y a promover diversas conferencias unionistas centroamericanos, especialmente las cumbres presidenciales celebradas en Corinto y el Pacto de Corinto.
La administración de Zelaya mantuvo tensas relaciones y desacuerdos con Estados Unidos, lo que llevó a éste a dar ayuda a los opositores conservadores de Zelaya en Nicaragua. En 1907, buques de guerra estadounidenses ocuparon diversos puertos de Nicaragua. La situación llego al punto de existir un conflicto interno entre los liberales nicaragüenses por un lado, y los conservadores y Estados Unidos por otro (que los financiaba). En 1909 algunos mercenarios norteamericanos fueron capturados y ejecutados por el gobierno de Zelaya, lo que sirvió para que Estados Unidos considerase la acción como una provocación para la guerra, y derrocamiento ilegal de Zelaya por medio de la Nota Knox, del secretario de Estado de Estados Unidos, Philander Chase Knox.

 Su derrocamiento y muerte

A principios de diciembre, infantes de marina estadounidenses ocuparon diversos puntos de la costa caribeña nicaragüense. El 17 de diciembre de 1909 Zelaya se vio obligado a dimitir, exiliándose en México para terminar en Nueva York, donde murió años después. En Nicaragua se estableció un gobierno proamericano bajo la presidencia de José Madriz Rodríguez. Mientras tanto, los militares estadounidenses permanecieron ilegalmente y represivamente en el país hasta 1933, Leer más...

General José Santos Zelaya.

José Santos Zelaya (1893-1919) gobernó Nicaragua durante dieciséis años, entre 1893 y 1909, ejerciendo una dictadura ilustrada. Entre sus logros se encuentra la reintegración a Nicaragua del territorio de la Costa de los Mosquitos, o reino de Mosquitia, y el establecimiento de una efímera federación de naciones centroamericanas, la República Mayor de Centroamérica, que duró tres años (1895-1898) y de la que solo formaron parte, además de Nicaragua, El Salvador y Honduras. Bajo el signo del progreso, Zelaya inició además una serie de reformas en el país, como la institución de la enseñanza laica y del matrimonio civil, y decretó la confiscación de los bienes de la Iglesia. Bajo su gobierno, se dio impulso a la construcción de líneas ferroviarias, y al transporte marítimo, con la introducción de la navegación a vapor en el lago Managua y la realización de importantes obras en los puertos de San Juan del Sur y San Juan del Norte.
En 1906 Nicaragua mantuvo una corta guerra con Guatemala, Honduras y El Salvador, que se resolvió, tras la mediación de Estados Unidos, en un tratado firmado en Chicago el 23 de abril de 1907, según el cual cada nación debería abstenerse de inmiscuirse en los asuntos de las demás, y, en caso de conflicto, las cuatro se comprometían a aceptar la decisión de un Tribunal de Justicia Centroamericano, cuya sede se instituyó en Cartago (Costa Rica). Leer más...

30 años de Gobierno Conservador.

Treinta años conservadores

A partir de 1858 se inició una etapa de recuperación económica e institucional, que constituye uno de los períodos más sobresalientes de la historia de Nicaragua conocido como la época de los treinta años, de predominio conservador. La economía, el desarrollo cultural y social, este último en menor medida debido a la desigualdad de clases, convirtieron al país en el más estable y rico de toda la América Central y en una de las mejores economías del continente, con un sólido régimen constitucional y una administración proba y austera de las finanzas públicas. Todo esto provocó una nueva oleada de inmigrantes provenientes de Europa, principalmente de Alemania e Italia, lo que hizo florecer aún más la economía, mientras El Salvador, Honduras y Guatemala se mantenían en conflictos armados y en Costa Rica se daba una época de golpes militares.
Durante esta época se sucedieron en el poder Tomás Martínez Guerrero (1858-1867), Fernando Guzmán y Solórzano (1867-1871), Vicente Cuadra y Ruy Lugo (1871-1875), Pedro Joaquín Chamorro y Alfaro (1875-1879), Joaquín Zavala Solís (1879-1883), Adán Cárdenas del Castillo (1883-1887), Evaristo Carazo Aranda (1887-1889) y Roberto Sacasa y Sarria (1889-1893). En 1885, Nicaragua se unió a Costa Rica y El Salvador en una alianza militar para hacer frente a las pretensiones del Presidente de Guatemala Justo Rufino Barrios, apoyadas por el Presidente de Honduras Luis Bográn, de restablecer por la fuerza la unidad política centroamericana; pero las tropas nicaragüenses no tuvieron ocasión de entrar en combate, ya que Barrios murió en la batalla de Chalchuapa, poco después de haber invadido El Salvador. Leer más...

viernes, 12 de noviembre de 2010

Causas y consecuencias de la Guerra Nacional de Nicaragua.

La Guerra Nacional de Nicaragua, o Guerra Nacional Centroamericana, ocurrió entre los años 1856 y 1857. El conflicto fue el resultado de una guerra civil que involucró a los bandos legitimistas y democráticos en el territorio nicaragüense desde 1854, que terminó en la toma del poder por parte del filibustero William Walker. La conflagración provocó la unión de contingentes militares de las repúblicas centroamericanas que acabaron expulsando a las tropas filibusteras.

Contenido

[ocultar]

[editar] Antecedentes

El año 1854 estalló la guerra civil entre las facciones democrática (liberal) y legitimista (conservadora) que se encontraban asentadas en las ciudades de León y Granada, respectivamente. Los democráticos formaron un Gobierno Provisorio al mando de Francisco Castellón Sanabria, y no reconocían el Gobierno de Fruto Chamorro Pérez. Asimismo, buscaron fortalecer sus fuerzas militares con la ayuda externa, y para ello firmaron un tratado con el estadounidense Byron Cole. A raíz del acuerdo arribaron a tierra nicaragüense, en junio de 1855, un grupo de estadounidenses llamados La Falange Democrática al mando de William Walker.[1]
En esos años, el territorio nicaragüense tenía un enorme atractivo a nivel internacional, especialmente por el cruce del río San Juan donde se planeaba construir un eventual canal interoceánico. De hecho el magnate Cornelius Vanderbilt había obtenido del gobierno local el derecho de transportar pasajeros por el istmo a través de la Compañía Accesoria del Tránsito desde 1849. El establecimiento de esta empresa chocaba con los intereses británicos que no deseaban solamente perder el "dominio de los mares" que tenían en ese tiempo, sino la posesión de la costa este de Nicaragua a través del Reino de la Mosquitia.[2] El conflicto fue solucionado con el Tratado Clayton-Bulwer.

[editar] Ascenso al poder de William Walker

Desde el 18 de mayo de 1854 José María Estrada había asumido el gobierno nicaragüense en sucesión de Chamorro y tomó a su cargo enfrentar a las fuerzas opositoras. Sendos combates fueron librados en las localidades de Rivas y La Virgen, y la misma ciudad de Granada fue tomada por las fuerzas filibusteras y democráticas el 13 de octubre de 1855. Precisamente, en esta localidad fue firmado el acuerdo entre William Walker y Ponciano Corral Acosta, comandante de las fuerzas legitimistas, para evitar más derramamiento de sangre a raíz de una serie de confusos hechos donde resultaron agredidos pasajeros estadounidenses que atravesaban el país. Mateo Mayorga, miembro prominente de los legitimistas, fue una de las víctimas de la venganza de Walker. Del acuerdo, realizado el 23 de octubre, resultó nombrado Patricio Rivas como Presidente, Corral Ministro de Guerra, y Walker como General en Jefe del Ejército.
Sin embargo, el ex presidente legitimista Estrada inició un llamado a las demás repúblicas centroamericanas para que acudieran a Nicaragua para obrar a "mano armada como en causa propia hasta la desaparición de todo poder extraño y el restablecimiento de la Potestad legítima".[1] El mismo Corral, ante el poder real de Walker, envió misivas pidiendo ayuda, las cuales fueron incautadas y cayeron en manos de Walker quien ordenó su fusilamiento.
Para el 18 de febrero de 1856, Walker influyó sobre Patricio Rivas para que revocase la concesión otorgada a la Compañía Accesoria del Tránsito, que dio lugar a que Vanderbilt se mostrara como un importante enemigo de su campaña. El filibustero destituyó a Rivas y nombró en su lugar a Fermín Ferrer el 20 de junio de 1856. Convivían entonces en el territorio tres presidentes: Estrada, Rivas, y Ferrer. Por otro lado, para el 1 de marzo de 1856 el gobierno costarricense de Juan Rafael Mora Porras había declarado la guerra al gobierno filibustero en Nicaragua en vista de su amenaza sobre el territorio, iniciando así la Campaña Nacional de Costa Rica. El mismo mandatario había alertado sobre la llegada de los aventureros desde finales de 1855.[3] El 12 de julio de 1856 Walker se proclamó presidente de Nicaragua a través de unas elecciones amañadas.

[editar] La Guerra Nacional

Por su parte, representantes gubernamentales de Honduras, El Salvador y Guatemala firmaron en la Ciudad de Guatemala[4] un Tratado de Alianza el 18 de julio de 1856 para la "defensa de su soberanía e independencia" que además reconocía a Patricio Rivas como presidente e iniciaba la expulsión de las autoridades intrusas.[5] Costa Rica no pudo asistir en ese momento a la alianza debido al estrago que la enfermedad del cólera había causado en sus tropas, aunque reanudaría las acciones posteriormente. Asimismo, las facciones democráticas y legitimistas, aliadas a Patricio Rivas, firmaron un “Pacto Providencial” declarando la guerra contra William Walker el 12 de septiembre.[6] Para el día catorce fue librada la batalla de San Jacinto.
Acosadas sus tropas hacia finales de 1856, Walker ordenó la destrucción de Granada al término de un fatídico sitio. La devastación de la ciudad enfureció a los aliados centroamericanos y los mismos nicaragüenses.[7] No obstante, para el mes de diciembre, el ejército costarricense, coadyuvado por el empresario Vanderbilt y los ingleses, tomaría el río San Juan cortando la ayuda externa de Walker. Para 1857 la localidad de Rivas se había convertido en el último refugio de los filibusteros; aunado a esto, Mora había hecho circular una nota ofreciendo perdón y repatriación que provocó deserciones en el contingente enemigo.
Con la mediación del capitán estadounidense Charles H. Davis, William Walker se rindió el 1 de mayo de 1857. Leer más...

Guerra Nacional de Nicaragua.


PRESENTACIÓN
NOTICIAS
MEDALLA CONMEMORATIVA
GALERIA DE FOTOS
 SEPARATA
 La Independencia
 El Período de la Anarquía
 Amenazas a la soberania
 La guerra civil
 La guerra nacional
 La guerra nacional II
 Reflexiones sobre la Guerra    Nacional
 Estadísticas (1ra. mitad siglo XIX)
 

La Guerra Nacional

Tres Gobiernos
El General en Jefe William Walker destituyó al Presidente Patricio Rivas, acusándolo de promover la anarquía y unirse a los enemigos centroamericanos. A continuación, en virtud de las facultades “conferidas por el Supremo Gobierno,” y considerando “el deber sagrado de salvar la Patria… de sus enemigos exteriores e interiores”, nombró Presidente a Fermín Ferrer el 20 de junio de 1856.
Este decreto dividió a los democráticos. Unos siguieron a Rivas; otros, a Ferrer. Rivas no aceptó su destitución y declaró la guerra al gobierno Ferrer-Walker.  Estando el ex presidente Estrada en el exilio, los militares legitimistas lo proclamaron “único gobernante”. Meses después, el 29 de junio, asumió el cargo, instaló su gobierno en Somotillo y llamó a la unión antifilibustera:
Proclama de Estrada, 29 de junio
“Nicaragüenses:… El Gobierno Legítimo que desapareció de hecho el 25 de octubre último, vuelve hoy, apoyado por los Estados, a trabajar con vosotros en la grande obra de arrojar a los aventureros que oprimen al país… Levantaos…: No más rencillas de partido; no más discordias fratricidas... Uníos… sólo haya entre nosotros un color político, una sola voz: Unión y fraternidad entre los hijos del país: guerra sólo a los filibusteros...”.
Desde esta fecha, Nicaragua tuvo tres gobiernos simultáneos: el de Ferrer, Rivas y Estrada.
Alerta centroamericana 
A pesar de los intentos de paz, Centroamérica sólo se alarmó cuando Walker ocupó la Jefatura militar del gobierno Provisorio, nacido del Tratado Corral-Walker. El presidente Mora de Costa Rica rechazó al nuevo gobierno, por considerarlo un instrumento del expansionismo filibustero y, en noviembre de 1855, alertó al pueblo a preparar “sus armas”. En febrero, le declaró la guerra y, el 1 de marzo,  llamó a sus “compatriotas” a luchar por Nicaragua, e invitó a los partidos beligerantes a unirse contra los invasores: 
Proclama de Mora, 1 de marzo
“¡A las armas!... Marchemos a Nicaragua a destruir esa falange impía que la ha reducido a la más oprobiosa esclavitud…Vamos a decirles: Hermanos de Nicaragua, levantaos; aniquilad a vuestros opresores; aquí venimos a pelear… por vuestra libertad, por vuestra patria; unión, nicaragüenses, unión; inmolad para siempre vuestros enconos; no más partidos, no más discordias fratricidas; paz, justicia y libertad para todos; guerra sólo a los filibusteros.
            Todos los leales hijos de Guatemala, El Salvador y Honduras marchan sobre esa horda de bandidos… Dios nos dará la victoria, y con ella la paz, la concordia, la libertad y  la unión de la gran familia centroamericana”. 
 
La resistencia de Estrada, Mora y de los gobiernos centroamericanos, cuyos ejércitos marchaban a Nicaragua,  enfureció a Walker, quien les declaró enemistad eterna:
Proclama de Walker a los Centroamericanos
“Llamada a Nicaragua por el partido democrático de la República, la fuerza americana… se ha esforzado en sostener los principios en cuyo favor se emprendiera la Revolución de 1854. Para conciliar en un todo la paz general, dispuestos estábamos a sepultar en el olvido las disensiones anteriores y a procurar que ambos partidos quedasen amalgamados, y no formasen más que uno. Con tal objeto, desde el tratado de octubre último, hemos contenido a nuestros antiguos amigos los democráticos, intentando reconciliarlos con los… afectos al Gobierno de Estrada.
… Mas… nuestras proposiciones amistosas... fueron tratadas con desprecio… y el único pretexto de semejante conducta es la presencia de fuerzas americanas en Nicaragua.
El… partido Legitimista de Nicaragua ha rechazado nuestros esfuerzos conciliatorios; ha sostenido comunicaciones con los demás serviles de los otros Estados; y… ha procurado debilitar el actual Gobierno Provisional, dando ayuda y bríos a los amigos exteriores de Nicaragua…(y)… no queda a los americanos de Nicaragua más arbitrio que… declarar enemistad eterna al partido servil y a los Gobiernos serviles de la América Central…”
En mayo, Guatemala declaró la guerra al gobierno Provisorio y a Walker. 
Proclama de Carrera
“Guatemaltecos: Bien conocidos son los sucesos ocurridos en Nicaragua desde que en Octubre del año pasado unos pocos extranjeros… se apoderaron en aquella República de la autoridad… 
Soldados: No os llaman hoy al campo de batalla… nuestras funestas y lamentables discordias intestinas; os llaman el honor y el interés nacional. Vais a defender… la causa de nuestra Religión y de nuestra raza... Entretanto, os recomiendo la más estrecha unión con vuestros hermanos del Salvador, Honduras y Costa Rica, para llevar a cabo la obra común de lanzar del país a los que, sin derecho alguno, han venido a mezclarse en nuestras disensiones y a amenazarnos con la más oprobiada servidumbre”.
Hacia la Guerra Nacional:
Cuando el gobierno de Patricio Rivas declaró la guerra al filibusterismo, el gobierno salvadoreño de Dueñas lo apoyó por el compromiso adquirido en los tratados de Cojutepeque. Luego entró Honduras. Desde entonces, al unísono, los centroamericanos lucharon por su nacionalidad. Sin embargo, Nicaragua seguía desunida. Los gobiernos de Estrada y Rivas, al combatirse, beneficiaban a Walker.
La presidencia de Walker:
Ferrer autorizó la candidatura presidencial de Walker. Y se cumplieron las pretensiones filibusteras, denunciadas por Marcoleta: “Sus intenciones eran las de unirse a una de las partes beligerantes en Nicaragua, vencer de este modo la otra, y, sobreponiéndose después a las dos, formar un nuevo Gobierno”. Walker confesó más tarde que su Falange no vino “para ser guardia pretoriana ni jenízaros” del Gobierno Democrático. Las “elecciones” celebradas los días 22, 23 y 24 de julio, fueron anticonstitucionales y fraudulentas, según el siguiente cuadro:
Art. 130 y 131 de la Cn. de 1838
Testimonio del corresponsal del NYT
Art. 130.- Para ser Director se requiere:
1º.- Naturaleza en la República, debiendo los originarios de los demás Estados tener cinco años de vecindario….
3º.- Haber sido siete ciudadano.
Art. 31.- No podrán obtener el empleo de Director los jefes militares, de Teniente Coronel inclusive arriba,…en actual servicio…

"Ustedes sin duda han visto el resultado de las elecciones publicadas por El Nicaragüense… ¡en algunas poblaciones le dan a Walker más votos que el cuádruple de los habitantes, contando a todos los hombres, mujeres, niños y bestias”.
La Guerra Nacional
La presidencia de Walker incentivó la unidad. A pesar de alguna resistencia, se superaron los obstáculos y, el 12 de septiembre de 1856, los legitimistas y los democráticos partidarios de Patricio Rivas firmaron el “Pacto Providencial”.
Pacto Providencial
“…Deseando poner término a las diferencias interiores… hemos celebrado el siguiente CONVENIO:
1º.-  El señor Presidente Provisorio, don Patricio Rivas, continuará con el mando Supremo de la República, hasta que le suceda la persona llamada constitucionalmente….
4º.- Tomás Martínez queda ampliamente autorizado e investido de las facultades del Gobierno… para conservar y aumentar la fuerza que crea conveniente para obrar contra Walker...
La guerra se transformó en GUERRA NACIONAL de NICARAGUA y de LA NACIÓN CENTROAMERICANA: Todos contra Walker.
El Pacto Providencial suprimió los gobiernos Legitimista y Provisorio e instauró un único gobierno Provisional Nacional frente al gobierno de Walker.
La Batalla de San Jacinto:
Apenas firmada la paz, los nicaragüenses triunfaron sobre los filibusteros en la más gloriosa hazaña nacional: LA BATALLA DE SAN JACINTO. Esta gesta se ha convertido en la FIESTA NACIONAL por excelencia, junto con la de la INDEPENDENCIA. Ambos momentos históricos los conmemoramos en LAS FIESTAS PATRIAS, los días 14 y 15 de septiembre.
Análisis Táctico de la Batalla
 (Por Francisco Barbosa, Teniente Coronel del Ejército de Nicaragua)
Filibusteros en Nicaragua
Según Walker, para finales de 1856, su ejército llegaba a 2,000 hombres. En Granada tenían su Cuartel General, el Primer Batallón de Rifleros y un almacén de intendencia. Las demás unidades de combate estaban ubicadas así: el Segundo Batallón de Rifleros, comandado por McDonald, en Tipitapa; un Batallón de Ingeniería Ligera en Masaya; una Compañía de Rifleros en Managua; y dos compañías en Río San Juan. Tenían rifles Sharps, Minié y Misissippi, revólveres Colt y artillería ligera: morteros, cañones y obuses.
Tropas de Estrada En julio de 1856, el coronel Fernando Chamorro confió una columna de cien hombres al coronel José Dolores Estrada con la misión de dirigirse a los llanos de Ostócal,  cerca de Tipitapa, para impedir el robo de ganado y el abastecimiento de alimentos de las tropas filibusteras de Managua, Tipitapa y Granada. En las instrucciones a Estrada, se enfatizaba evitar enfrenamientos con las fuerzas de Walker a no ser “que les cortaran la retirada”. Los nicaragüenses, el 9 de agosto, llegaron a la hacienda San Jacinto, al  nordeste de Tipitapa. El 1 de septiembre, al capturar un yanqui, se enteraron de que tropas filibusteras se preparaban para atacar a las nacionales en esos llanos. Entonces, Estrada, con sus oficiales y tropas, decidió enfrentar a los filibusteros y organizar la defensa, considerando las características del lugar, la cantidad de tropas, el armamento y las municiones existentes.
Estrada solicitó refuerzos al mando del “Ejército del Septentrión”, los que llegaron el 11 de septiembre. Era una compañía de 66 indios flecheros matagalpinos. Luego, preparó el terreno para resistir un ataque de fuerzas mayores, principalmente en la dirección sur de la casa, y organizó sus 160 hombres en tres compañías, con las cuales planificó la organización de dos cercos defensivos: uno interno, alrededor de la casa;  otro externo, en la línea de los corrales de piedra y madera.
Antecedentes de la batalla El mando filibustero de Tipitapa sabía que, el 1 de septiembre, tropas nicaragüenses habían capturado un yanqui y que, además, ocupaban la Casa-hacienda; por ello, el coronel McDonald y el capitán Jarvis, con 40 filibusteros, decidieron atacarlos; pero en las cercanías de la Casa-hacienda encontraron una férrea resistencia que, después de dos horas, los obligó a retirarse. Murieron seis filibusteros, incluyendo a Jarvis;  capturaron 14 rifles, 4 espadas y 15 bestias. De los nacionales, el oficial Carlos Alegría resultó herido y el cabo Justo Rocha, muerto.
McDonald informó al Cuartel General sobre la situación de sus tropas y la necesidad de un ataque mayor. Walker, entonces, conformó una columna, incluyendo voluntarios de Granada y Masaya, la que llegó a Tipitapa el 13 de septiembre. Aquí se integró el coronel Byron Cole, quien asumió el mando con Marshall y O’Neal. Planificaron el ataque y se dirigieron hacia San Jacinto.
Ataque filibustero y desarrollo de las acciones Las tropas de Byron Cole, el 14 de septiembre, al amanecer, llegaron a San Jacinto, dividiéndose en tres columnas: la primera, mandada por el teniente Robert Milligan, atacó el flanco izquierdo del corral de madera; la segunda, por el mayor O’Neal, avanzó por el frente; y la tercera, del capitán Watkins, en dirección del flanco derecho, donde se unía el corral de madera con el cerco de piedra.
Estrada, informado del avance filibustero, ordenó no abrir fuego hasta que el enemigo estuviera cerca de las fortificaciones. Su puesto de mando estaba en el centro de la hacienda y distribuyó las tropas así: en el flanco derecho, las de los tenientes Alejandro Eva, Miguel Vélez y Adán Solís; en el centro, la compañía del capitán Francisco Sacasa; y, en el flanco izquierdo, al oficial Ignacio Jarquín, apoyado por los oficiales Salvador Bolaños y Venancio Zaragoza.
Byron Cole mandó atacar y las tres columnas, simultáneamente, atacaron con rifles y revólveres, siendo rechazadas por los nicaragüenses, a pesar de la desventaja ante la superioridad del armamento contrario. Los nacionales tenían rifles de chispa y escasa munición; los filibusteros, revólveres y fusiles de repetición.  
Después de las primeras horas, recrudecieron los combates, imponiéndose la lucha cuerpo a cuerpo. Los extranjeros rompieron la defensa del flanco izquierdo y Estrada reforzó esta posición con los oficiales Vélez, Eva y Solís. La lucha era violenta y, a falta de municiones, algunos siguieron el ejemplo de Andrés Castro, quien derribó a un filibustero de una pedrada. La situación seguía crítica para los nacionales. Los filibusteros, a las 10 de la mañana, al romper el cerco defensivo, iniciaron un reagrupamiento para concentrar sus esfuerzos en esa dirección.
Entonces, Estrada envió al capitán Liberato Cisne, al teniente José Ciero y al subteniente Juan Fonseca con sus escuadras a atacarlos por la retaguardia y los filibusteros huyeron hacia la hacienda San Idelfonso. El capitán Bartolo Sandoval, el teniente Miguel Vélez, -en bestias-, y soldados a pie los persiguieron. En esta heroica acción, el sargento Francisco Gómez murió de fatiga. Este esfuerzo dio su fruto, pues consiguieron matar a Byron Cole y asegurar la victoria.
Resultados
Estrada, en el Parte Oficial, reflejó los resultados de esta batalla. Hubo 10 muertos y 7 heridos nicaragüenses.  De los filibusteros, 27 muertos y, además, capturaron 20 bestias, 25 pistolas, 32 rifles Sharp, 47 paradas, chamarras y sombreros.
Esta Batalla influyó enormemente en los patriotas nicaragüenses y centroamericanos. Muchos de sus gloriosos combatientes continuaron luchando hasta la expulsión de Walker. El coronel Estrada, por sus relevantes méritos, especialmente por las acciones de San Jacinto, fue ascendido, el 25 de junio de 1857, a General de Brigada.
Para Estrada, la Batalla de San Jacinto fue una acción más en el cumplimiento de su deber ciudadano, luchando contra el expansionismo filibustero esclavista en Centroamérica.  
 
 
© Derechos Reservados, Ministerio de Relaciones Exteriores, Nicaragua, 2006
Leer más...